lunes, 9 de mayo de 2011

NOVELA POR ENTREGAS (CAPÍTULO II)


Que mi matrimonio era una frustración era obvio, que dormíamos encamas separadas desde hacía mucho tiempo incontornble. Que teníamos dos hijos maravillosos por los que todo, hasta morir merece la pena, es incuestionable. Que yo desvié mi vida de una forma severa y no recomendable, en nombrede mi paternidad solo yo lo sé. Pero avancé, como un burro con los ojos tapados que labra la tierra porque allí estaban mis hijos. Y claro que hubo amor al principio, amor, compasión, aventura, y opción. Tomé aquella opción... . Pero no se pueden tomar opciones basadas en la desesperación de no encontrar más nada , ni nos podemos conformar con amores rápidos . Ni yo debo trazarme misiones tan complejas olvidándome de mí. Fue aquella chica de 27 quien me lo enseñó, con sus lapidarias y herméticas frases absolutamente exentas de errores ortográficos, con su educación casi decimonónica , con su alegría de vivir a pesar desus heridas. Yo siempre hubiese pensado que ella era mucho para mí, aunque yo hubiese tenido 30 y fuese soltero cuando la conocí, pero yo no me resigné ni a ser viejo para ella, ni a no ser soltero, y sobre todo nome resigné a la idea de que ella fuese mucho para mí. Me agarré a mis teorías, a los consejos que siempre le dí a otros, me exhibí en mi imperfección, y le abrí el cofre de mis tesoros interiores, la llevé con palabras a través de los laberintos de mi pirámide y le mostré las cámaras secretas, la llevé a mis playasfavoritas, le canté mis canciones preferidas, compuse para ella, le enseñé mi colección de pecados y heridas clavadas en una pared como una colección de bellas, y también paradójicamente horribles y aterradoras, mariposas... No quise dejar nada fuera, no quise esconder nada. Me moría por conocerla en profundidad y solo se me ocurría darme aconocer de una forma casi pornográfica , mostrándole el alma sin tapujos, toda mi imperfección en estado puro. Y ella...sencillamente no quedó impasible. Cuando me dí cuenta le había construído un blog, que yo iba alimentando con nuesvos "posts", que se iban encadenando a los anteriores como plumas de la cola de un pavo real,un mosaico de espejos donde quería que ella se viese reflejada. Con la obsesiva intención de hacerla sentir, de hacerla reir y llorar, de ser algo para ella, de dejarle una marca, de que nunca se olvidase de mí. Pero internet no nos deja ver el poliedro en todas sus caras, y muy pronto me sentí estar "invadiéndola", sentí que no debía hacer más aquello. Ella nunca me escondió que tenía novio y yo comencé a no poder soportar la idea. Creo que nos quedamos prendidos a aquél blog en un dilálogo defensivo,porque levantar las emociones de otra persona es una forma de agresión. Ella se encargaba de cortar quirúrgicamente cualquier esperanza mía de una relación de otro tipo, y yo me distancié profundamente de la realidad. Llegué a pensar que un día nos conoceríamos, que teníamos alguna misión juntos . Y a todas horas, minutos y segundos, pensaba en ella. Comprendí que mi matrimonio no estaba bien, comprendí que mi vida en muchos aspectos había sido un error, y me llegué a sentir como alguien mucho más viejo de lo que era "molestando" por internet a alguien mucho más joven de lo que ella era. Y me dolía su novio, me dolía que me rechazase, me dolía la imposibilidad me dolía su defensa... Y un día, exhausto, cansado con la vista quemada en mi "obra", lo borré todo. Y lo borré con sinceridad, para apartarme de ella, para volver a larealidad, para resignarme a mi vida, para acabar mi carrera y seguir avanzando, como aquella estrella fugaz, para que mi barco no chocasecontra las rocas como le ocurrió a Ulises, hiponizado por el encantode la bella sirena, para que mis alas de cera no se derritiesen, como las de Ìcaro, con el calor de aquél Sol radiante del cual me llegué a sentir tan cerca. Casi pude tocarla con palabras, casi la besé... Jugamos con citas, con palabras, con versos, con metáforas y canciones.. En un bosque de flores semánticas nos perseguíamos, peleábamos y nos reconciliábamos... Y, mientras tanto, la convicción de que yo debía separarme, cambiar radicalmente de vida iba creciendo en mi interior. Y, en el fondo de mí, la certeza de que nunca la llegaría a conocer en persona. Pero ya era tarde para mí. Yo, que había hablado con miles de personas en internet, y que siempre supe separar la ficción de la realidad, me encontré con ella y aún hoy me cuesta creerlo....

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