Hoy me he levantado temprano, más temprano de lo habitual, al alba (como esa canción que , por cierto, no me gusta nada "...quiero que no me abandones, amor mío al alba..."
Una mañana clara y prometedora y, al final, muy lejos pero incontornable, el mar.
Todo era tranquilo allí fuera (excepto en mi alma donde siempre hay tormenta ) cuando una sombra se cernió sobre mi cabeza, como una saeta, un fugaz ataque de alguien o algo que emitía estridentes chillidos de guerra en defensa de algo en lo que le fuese la vida.
Eran ellas, las de siempre, y han vuelto a mi balcón a anidar .
Sí, ya sé que a tí no te dicen nada y nada significan ya para tí , pero son las golondrinas porque ya es Primavera.
Debo reconocer que a mí me pasarían desapercibidas si no fuese porque cada vez que las veo, indefectiblemente , sin excepción e irremediablemente , me recuerdan a tí.
Una mañana clara y prometedora y, al final, muy lejos pero incontornable, el mar.
Todo era tranquilo allí fuera (excepto en mi alma donde siempre hay tormenta ) cuando una sombra se cernió sobre mi cabeza, como una saeta, un fugaz ataque de alguien o algo que emitía estridentes chillidos de guerra en defensa de algo en lo que le fuese la vida.
Eran ellas, las de siempre, y han vuelto a mi balcón a anidar .
Sí, ya sé que a tí no te dicen nada y nada significan ya para tí , pero son las golondrinas porque ya es Primavera.
Debo reconocer que a mí me pasarían desapercibidas si no fuese porque cada vez que las veo, indefectiblemente , sin excepción e irremediablemente , me recuerdan a tí.
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